¿Sabes por qué es el día del artista plástico?
Cada 10 de mayo se celebra el
Día del Artista Plástico en Venezuela en homenaje al natalicio de uno de nuestros más grandes maestros de la plástica venezolana: Armando Reverón, mejor conocido como el
pintor de la luz
Tal día como hoy se celebra el
Día del Artista Plástico en Venezuela en homenaje al 123º natalicio de Armando Reverón.
Reverón, fue un irreverente, alejado de la rutina de su época y del conformismo. Fue muy inspirado hasta en el modo de utilizar el pincel. El problema luz y el manejo del color caribeño fue vital en su vida, de allí la importantes pinturas que representan el Macuto de medio día, donde la naturaleza se desvanece por la luz del sol incandescente del trópico en esa hora. de mayor fulgor. Su obra es variada en calidad, de gran sinfonía plástica en cada período, alcanzando siempre una alta creatividad.
La pintura de Reverón es realista, intensa. Nunca tuvo contrastes estridentes. En sus cuadros se encuentra mesura en el color y armonía fría. Reverón marcó una época. No sólo en vida fue personalista, sino que, después de muerto, lo ha seguido siendo. Su estilo fue único y seguirá intacto a través de la historia de la pintura venezolana.
________________
Fuente:
http://www.elperiodiquito.com/article/7226/Hoy-es-el-D-a-del-Artista-Pl-stico-en-Venezuela
Reverón, fue un irreverente, alejado de la rutina de su época y del conformismo. Fue muy inspirado hasta en el modo de utilizar el pincel. El problema luz y el manejo del color caribeño fue vital en su vida, de allí la importantes pinturas que representan el Macuto de medio día, donde la naturaleza se desvanece por la luz del sol incandescente del trópico en esa hora. de mayor fulgor. Su obra es variada en calidad, de gran sinfonía plástica en cada período, alcanzando siempre una alta creatividad.
La pintura de Reverón es realista, intensa. Nunca tuvo contrastes estridentes. En sus cuadros se encuentra mesura en el color y armonía fría. Reverón marcó una época. No sólo en vida fue personalista, sino que, después de muerto, lo ha seguido siendo. Su estilo fue único y seguirá intacto a través de la historia de la pintura venezolana.
________________
Fuente:
http://www.elperiodiquito.com/article/7226/Hoy-es-el-D-a-del-Artista-Pl-stico-en-Venezuela
Ricardo Razetti. Armando Reveron. Colección FMN-GAN
Armando Reveron
Artista y pintor, la obra de Armando Reverón, realizada en gran parte en
el Litoral Central de Venezuela, capta y transmite toda la luminosidad
del trópico. Asimismo, Reverón fue miembro sobresaliente de la Academia
de Bellas Artes, junto a figuras de la talla de Manuel Cabré, Antonio
Edmundo Monsanto y César Prieto. En cuanto a su infancia, se sabe por
testimonios de la época, que a los pocos años de haber nacido en Caracas
fue dado en crianza por su madre a un matrimonio de Valencia, los
Rodríguez Zocca, quienes se ocuparon de su primera educación. Su
tío-abuelo materno, Ricardo Montilla, quien había estudiado pintura en
Nueva York, fue la persona que contribuyó de manera definitiva a
despertar su vocación artística. En 1904, vive con su madre en Caracas y
en 1908, se inscribe en la Academia de Bellas Artes, donde tiene como
profesores a Antonio Herrera Toro, Emilio Mauri y Pedro Zerpa. Su
rendimiento le valió la recomendación de sus profesores para obtener, al
finalizar el curso de 1911, una pensión de estudios en Europa. Este
mismo año, viaja a España y se dirige a Barcelona, donde ingresa a la
Escuela de Artes y Oficios. En 1912, hace un breve retorno a Caracas; de
nuevo en España, entra a la Academia de San Fernando en Madrid. De
acuerdo con algunos estudiosos de su vida y obra, la capital española
dejó una profunda huella en su espíritu; siendo cautivado además por el
universo de Francisco Goya. Más tarde, recordará su paso por el taller
de Moreno Carbonero, pintor un tanto extravagante, maestro de Salvador
Dalí.
Regresa a Venezuela a mediados de 1915. Ya en Caracas, retoma su trabajo
mientras asiste a las sesiones del exclusivo Círculo de Bellas Artes.
Aunque estaba ausente de Caracas para el momento de la creación del
Círculo, los fundadores de éste le consideraban como uno de los suyos.
En 1916, Reverón pinta al aire libre sus primeros paisajes resueltos
dentro de una tonalidad azul. Poco después se traslada a La Guaira donde
vive de dar clases privadas de dibujo y pintura. Allí conoce en el
carnaval de 1918 Juanita Mota, quien sería su modelo e inseparable
compañera. También en La Guaira, se encuentra al pintor de origen ruso
Nicolás Ferdinandov, a quien había conocido en Caracas el año anterior.
Durante este tiempo Reverón visita con frecuencia el rancho de
pescadores que el pintor ruso ocupaba en Punta de Mulatos. Siguiendo los
consejos de Ferdinandov, Reverón decide instalarse en el litoral,
iniciando con esto una nueva etapa en su vida y en su obra. Para 1921,
vive en un rancho de la playa, en el sector de Las Quince Letras.
Poco tiempo después se muda y comienza a construir, un poco al sur, el
castillete que le serviría de morada para el resto de su vida. Esta
decisión coincidió también con un cambio de conducta y por supuesto, una
transformación de sus conceptos artísticos. En este período, al adoptar
hábitos primitivos y desvinculado de la ciudad, Reverón pudo
desarrollar una percepción más profunda de la naturaleza y esto lo llevó
a emplear un método de pintar, así como a adoptar procedimientos y
materiales que se adecuaban a su afán de representar la atmósfera del
paisaje bajo efectos del deslumbramiento producido por la luz directa
del sol. Además, creó valores cromáticos e ideó nuevos soportes,
utilizando elementos autóctonos. Entró así a lo que el crítico Alfredo
Boulton llamó su “Época Blanca”, ubicada aproximadamente entre 1924 y
1932. En 1933, se le hizo un primer reconocimiento, al realizarse una
exposición de su obra en el Ateneo de Caracas, que luego fue presentada
en la galería Katia Granoff de París. A comienzos de 1940, inició su
“período sepia”, al que correspondería un conjunto de lienzos pintados
en el litoral y en puerto de La Guaira y en donde los tonos marrones del
soporte de coleto constituyen el valor cromático dominante de la
composición; paisajes de mar y tierra donde destacan las marinas del
playón, a los que siguió un período depresivo tras sufrir el artista una
crisis psicótica que obligó a su reclusión en el sanatorio San Jorge,
de José María Finol. Recuperado, no volvió a pintar como antes. A partir
de este momento, se refugió en un universo mágico que, en torno a
objetos y muñecas creados por él, dio origen a la última y delirante
etapa expresionista de su obra; etapa figurativa caracterizada por el
empleo de materiales tales como tizas, creyones y por una fantasía
teatral que se tornaba más y más incontrolable pero que, a través de un
dibujo que aspiraba a la corrección académica, buscaba restituir el
equilibrio emocional de Reverón.
La última de sus crisis tiene lugar en 1953, siendo internado nuevamente
en la clínica de Báez Finol, el mismo año en que le era conferido el
Premio Nacional de Pintura. Confortado por este tardío estímulo,
trabajaba con ahínco para una exposición que había anunciado el Museo de
Bellas Artes, cuando le sobrevino la muerte mientras se encontraba en
el sanatorio San Jorge.
________________
Tomado de:
http://www.venezuelatuya.com/biografias/reveron.htm
Correo Electrónico:
utiebparroquiasanagustin@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario